Me llamo Guadalupe Aguilera.
Las piedras que encuentro en mi camino, que dibujo y grabo, nos cuentan la historia del mundo, mitos y leyendas.
Espero que os guste.
Vigo está anclado en uno de los más bellos lugares de la tierra, y el litoral gallego con sus ensenadas, calas y puertos no pasaron desapercibidos para las incursiones piratas, que guarnecidos en las calas de la costa saltaban a tierra para apresar a hombres que tripulasen sus galeras y a mujeres para enviar a los harenes de África.
Muchas veces pedían rescate por su libertad, lo que llevaba a familias enteras a vender cuanto tenían y, si aún así no les llegaba, a tener que mendigar de pueblo en pueblo hasta conseguir lo que les faltaba. Muchas islas se convirtieron en nidos de piratería.
En el año 1.115 los almorávides se apoderaron de las islas de Arosa, Sálvora y Ons y desde ellas bloquearon durante cinco años los puertos de Galicia. Fueron expulsados por el arzobispo Gelmírez que había armado una marina de guerra, la primera que hubo en España.
Cuando ya hacía siglos que los piratas normandos y musulmanes (siglos VIII y XII) nos habían dejado tranquilos, comenzaron los franceses.
Durante el reinado de los Reyes católicos, un pirata apodado “Cólera” sembró el pánico en Pontevedra, Baiona y Vivero. Siguieron los holandeses, los turcos, los portugueses y finalmente llegaron los ingleses.
Desde el comienzo del siglo XVI hemos sido atacados por corsarios. En el siglo XVIII los ataques corsarios a la costa y puertos de mar, suponían unas quinientas victimas anuales
.
El rey de los piratas, el más sanguinario y el que causaba más terror se llamaba Drake, nació en el condado de Devon en 1540, detestaba el catolicismo, quizás porque su padre era un fanático predicador protestante y por haber sufrido la persecución de los católicos. Su familia tuvo que huir al sur del país y refugiarse en un barco destartalado. Drake tenía nueve años. A los trece años aprendió a navegar con unas condiciones muy difíciles y se convirtió en un gran marino gracias a las enseñanzas de un viejo capitán, que le dejó en herencia su barco.
Después de la muerte del viejo capitán se alistó a la flota de los Hawkins, una familia de temibles corsarios.
En su segundo viaje a América el barco de Drake fue atacado por españoles y muchos de sus compañeros fueron asesinados. Desde entonces Drake se llenó de odio hacia España y juró vengarse. En su expedición a través del Pacifico, atacó y saqueó todas las posesiones españolas. Su fama y fortuna la obtuvo en 1572 cuando apresó en Cartagena de Indias tres convoyes de oro y plata.
Los hombres de negocios estaban deseando participar económicamente de sus expediciones. La reina Isabel de Inglaterra perdona todos sus crímenes y lo nombra caballero. Además, le ordena, que ataque y cause el mayor daño posible a los españoles y a todos los dominios de España y le hace entrega de dos barcos. Los comerciantes ingleses ponen a su disposición siete barcos, comerciantes de otros lugares también se unen, y consigue una flota de veintitrés barcos.
Se acuerda el reparto del botín que sería repartido en seis partes: Una sería integra para la reina, otra para Drake, y las otras restantes para repartir entre tripulación y “accionistas” .La tripulación la integraban 2.300 hombres, aventureros y asesinos con afán de lucro.
En 1585 Drake se dirige a las costas gallegas para apoderarse de una flota que llegaba de la Nueva España cargada de oro (con la que no se encontraron por menos de dos días de diferencia). Cuando se da cuenta que la presa se había escapado y que necesitaban provisiones para continuar el viaje decide atacar Vigo, porque conocía la importancia de su puerto.
Cuando llega a la Ría de Vigo decide apoderarse de Baiona, le manda un mensaje al gobernador de la plaza Pedro Bermúdez, comunicando que venía dispuesto al ataque si no se rinde. El gobernador pide ayuda al conde de Gondomar, que por aquel entonces tenía quince años. Cuando Drake ve que llegan los refuerzos de Diego Sarmiento se dirige hacia Vigo no sin antes pasar por las Islas Cies y arrasar el convento de San Esteban.
Dos mil piratas británicos desembarcan en Teis “en la playa de Ríos”. El asalto arrasó Vigo, hicieron numerosos prisioneros, asesinaron y violaron, destruyeron buques pesqueros y el convento de los franciscanos de la isla de San Simón, además se llevaron un botín de más de 30.000 ducados y una gran cantidad de víveres.
Cuatro años después la reina de Inglaterra le ordena al pirata Drake atacar Lisboa (ciudad que quería castigar por ser el punto de partida de la Armada Invencible). Drake desobedece y por su cuenta se dirige a La Coruña, creyendo que tras la derrota de la Armada Invencible allí estarían fondeados la mayoría de los barcos que lograron huir. Al darse cuenta de su error decide atacar a la población.
Los coruñeses se defendieron con gran valor y heroísmo sobre todo el que demostró tener una mujer conocida por “ María Pita”.
Después de esta derrota, toma rumbo a Lisboa, pero la expedición fue un fracaso y decide resarcirse atacando de nuevo a Vigo. Desembarcaron en tres puntos: Teís, Arenal de Coia y Ribera del Berbés. En pocas horas se hicieron los dueños de la villa, profanaron la Colegiata sacrificando cerdos y otros animales en el altar. En la villa de Vigo incendiaron 270 casas, y en Bouzas treinta y siete.
Robaron y violaron en todas las demás, Pero a los tres días los paisanos consiguieron reorganizarse y comenzaron a atacar a los piratas por varios puntos, además llegó Luís Sarmiento con milicias de Portugal, y con vasallos suyos. La lucha fue encarnizada, y hubo muchas bajas porque los vigueses preferían morir antes que rendirse.
Cuando estaban al límite de sus fuerzas y pensaban que nada más podían hacer, llegaron en su ayuda los paisanos de Lavadores y luchando codo con codo consiguieron que los piratas regresaran a sus barcos. El balance fue de 500 muertos y más de 200 heridos.
Pero la “La negra sombra” siguió cubriendo la villa de Vigo, de Bouzas y todas las aldeas del contorno; primero fue el hambre, la escasez de carne y sobre todo el pan, luego las epidemias y los piratas musulmanes.
Cuando Drake abandona la ría de Vigo para volver a Inglaterra, deja a sus piratas ingleses ocupando las Islas Cies. Con el consentimiento de la reina de Inglaterra (que su objetivo era la ruina de España) les ordena cerrar la boca de la ría y bloquear el puerto. Los marineros no podían salir a faenar por miedo a ser capturados, ni los buques acercarse a cargar y descargar mercancías. Fueron años muy duros, y muchos paisanos murieron de hambre.
Transcurridos 130 años desde el último ataque de Drake a Vigo, el general Lord Cobham, le preguntó al gobierno ingles si debía convertir la villa de Vigo en un Gibraltar gallego. Afortunadamente el gobierno ingles estaba en negociaciones con España y le ordenaron regresar con todos sus barcos.
“La negra sombra” continuó en Vigo hasta la llegada de la Reconquista, y nuestros paisanos tuvieron que seguir derramando su sangre, por defender nuestra Ría, nuestra libertad, y para que nuestros hijos no estuviesen sometidos a ningún yugo invasor extranjero.
1 de diciembre, 2013
Autora del Texto y Foto: Guadalupe Aguilera
Bibliografía y Textos extraídos de: Historias de las Rias (Editada por Faro de Vigo). Vigo apuntes historicos (Carlos Espinosa Feijoo)